Quiero dedicarle este post a mi gran tesoro, mi pequeña niña, ya mujer de 22 años, mi hija Marina, ella es lo mejor que me ha pasado desde que tengo uso de razón, desde que la ví salir a este Mundo hasta hoy, han sido tantas satisfacciones las que me ha dado, que casi no recuerdo los casi 2 años que se tiró de noctámbula cuando era pequeñita, su madre y yo estábamos muertos de sueño.
Su carrera estudiantil y universitaria ha sido tan brillante como no podía imaginar, espero que continue luchando por labrarse un futuro profesional en este difícil Mundo que estamos construyendo.
Viajera la que más, ansiosa de conocer nuevos países y perfeccionar sus idiomas, políglota por ello, simpática y noble, y lo más importante, toda una señorita en sus modales y forma de comportarse.
Una amiga y una hija, una hermosa flor a la que miro con fuerza, por la que lucho con uñas y dientes, y que no descansaré hasta ser capaz de orientarla y ayudarle por los difíciles caminos que va discurriendo la vida, con mi experiencia, por que yo ya lo he pasado, para ser su apoyo y su guía, no para interferirla; quiero que sea una mujer libre.
Para tí Marina, suerte con ese First y Advanced Certificate, sé que los conseguirás.
Tú más fiel admirador. Tu padre.